Los desarrolladores de esta herramienta tienen claro que la actividad de enfermos con trastornos de psicosis en internet y, sobre todo en redes sociales, es clave para poder evitar situaciones de riesgo
Javier Bonet Silvestre era un artista. Músico y escritor, con sólo 18 años se quitó la vida. Fue el 21 de diciembre de 2018. Una fecha imposible de olvidar para sus padres, Javier y Remei, que hoy, con el duelo aún latente, han acudido al Hospital 12 de Octubre para apoyar un proyecto que ha puesto en marcha el Grupo de Cognición y Psicosis del Instituto de Investigación del centro y que busca evitar el suicidio a través de una herramienta informática. “Seguramente, si hubiera llegado antes y Javier la hubiera utilizado, aún seguiría aquí”, insiste su padre.
Con el debate constante de si se debe o no hablar abiertamente del suicidio, Javier Bonet lo tiene claro: “Debe de dejar de ser un tabú. Mi hijo era brillante, rebelde, no paraba de planear cosas, le encantaba vivir, pero sus últimos años fueron tormentosos”. Coincide con él Juan Manuel Espejo, psicólogo clínico del hospital y uno de los impulsores del proyecto ‘Searching help’. El proyecto ya cuenta con 30 pacientes a los que “se informa y se les instala la herramienta en el móvil en la propia consulta. Está teniendo muy buena aceptación”, asevera.
Los datos que recoge esta herramienta, desarrollada junto a la empresa Yslandia, busca analizar los comportamientos de pacientes con psicosis y alertar si buscan ideas delirantes o suicidas en internet. “Analizamos tanto los rangos horarios, como palabras clave y otras personalizadas para cada paciente, así como las relacionadas con delirios”, explica Espejo. Todo esto, “nos alerta y nos ayuda a prevenir un intento suicida”. Y es que, como explica este experto, “cinco años después de experimentar el primer brote, un 18% intentará suicidarse y un 3% lo conseguirá”. La misión de esta herramienta es adelantarse y evitarlo porque, además, “la mayoría de estos pacientes son muy jóvenes, están entre los 15 y los 30 años”.
Los desarrolladores de esta herramienta tienen claro que la actividad de enfermos con trastornos de psicosis en internet y, sobre todo en redes sociales, es clave para poder evitar situaciones de riesgo. “Cuando tienen un brote, su actividad es compulsiva. Empieza a tener hiperactividad en redes sociales. Lanza 150 solicitud de amistad o un centenar de ‘me gusta’”, explica Borja Anguita, director de Yslandia. Lo que buscan con este programa es “demostrar la vinculación entre las búsquedas en internet y las ideas suicidas. Si funciona, en pocos meses podríamos implementarlo a un número mayor de pacientes”, añade Roberto Rodríguez, investigador principal. Los médicos van a tener la información en tiempo real y recibirán alertas tanto a sus correos electrónicos como a sus móviles.
A la presentación de esta nueva herramienta también ha acudido el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, que da mucha importancia a este tipo de iniciativas, ya que “el 3% de la población sufrirá un brote o episodio en su vida, lo que representa más de un millón de personas en España. Por eso es una prioridad para la Comunidad de Madrid” que se materializa a través del Plan de Salud Mental 2018-2020.