Las tasas de mortalidad por suicidio entre los niños y jóvenes han aumentado en más de un 50% en las últimas dos décadas y las visitas a hospitales por pensamientos suicidas vienen en alza, según un estudio publicado el 14 de noviembre en la revista Pediatrics.
Al mismo tiempo se ha visto un aumento en las tasas de depresión y trastorno de ansiedad entre los niños, lo que la administración Biden calificó como una crisis de salud mental sin precedentes.
La investigación descubrió que entre enero de 2016 y junio de 2021 hubo 81 mil 051 visitas a los servicios de urgencias por parte de jóvenes, cuyo motivo de asistencia fue ideación suicida.
El estudio utilizó datos de hospitales de Illinois. Los investigadores analizaron el número de jóvenes de 5 a 19 años que buscaron ayuda por suicidio en los departamentos de emergencia entre enero de 2016 y junio de 2021.
Los resultados
El estudio descubrió que las visitas a urgencias por pensamientos suicidas aumentaron un 59% entre los años 2016-2017 y 2019-2021.
Aproximadamente una cuarta parte de esas visitas terminaron en hospitalizaciones, cuyo aumento fue de 57% entre el otoño de 2019 y el de 2020.
También hubo un aumento del 36% en los estudiantes que informaron haber considerado el suicido, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos.
Escasez de atención para la salud mental
Hay una escasez de camas en todo el país para los niños que necesitan ayuda de salud mental, muestra la investigación. Una encuesta federal de 2020 encontró que el número de instalaciones de tratamiento residencial para niños disminuyó un 30% desde 2012.
La escasez de atención llegó junto a un aumento significativo en la prevalencia de los problemas de salud mental que pueden conducir al suicidio.
En 2019, uno de cada tres niños y la mitad de las niñas estudiantes de secundaria informaron tener sentimientos persistentes de desesperanza y tristeza.
¿A qué se debe el aumento en pensamientos suicidas?
El nuevo estudio no determinó exactamente por qué hay tantos jóvenes que acuden a los hospitales con pensamientos suicidas, pero se cree que puede ser una combinación de factores, explicó Audrey Brewer, coautora del estudio y médico de cabecera de pediatría general avanzada y de atención primaria en Ann & Robert H.
Muchos de los niños que fueron hospitalizados con pensamientos suicidas tenían otros problemas de salud mental como ansiedad, depresión y consumo de sustancias, añadió Brewer.
En caso de conocer a alguien que parece tener pensamientos suicidas puede obtener ayuda llamando a la Línea Nacional de Prevención al Suicidio marcando al 988, esta es directa y atiende casos relacionados con crisis de salud mental.
Fuente principal de la noticia: La American Academy of Pediatrics (AAP).