Cuba cuenta con las mayores cifras de suicidio en América Latina, y las principales causas son la depresión por prejuicios sociales y la crisis económica
En la noche del pasado lunes, una vida se perdió en el municipio de Bahía Honda, en Artemisa, dejando tras su partida una estela de dudas y preguntas, aún sin respuesta. Se trata de Carlos Manuel, un niño de apenas 14 años de edad, quien se ahorcó en su propia casa.
Según refieren allegados a la familia contactados por CubaNet, no existían razones aparentes que llevaran a imaginar que el pequeño tomaría tal decisión.
“Nuestras calles se llenaron de dolor una vez más y es muy triste perder a un angelito de esa forma, y más sin saber las razones, porque no aparentaba estar deprimido, ni tener problemas, siempre fue muy alegre. Solo supimos que llegó a la casa, puso música y se metió en el baño, ahí sucedió todo”, indicó una vecina, que no reveló su identidad por respeto a la familia.
La señora contó que días antes, Carlitos, como era conocido el pequeño, había disfrutado de una fiesta, a raíz de su graduación de noveno grado, junto a sus compañeros de aula y familiares. “El día de la graduación el niño también recibió una sorpresa, y es que su padre, que vive en los Estados Unidos, vino a verlo y llegó sin que nadie supiera. Carlitos estaba muy contento con eso”, agregó la vecina.
CubaNet intentó contactar con la familia del menor con la intención de obtener declaraciones más claras sobre el hecho, pero sus padres no quisieron hablar.
Hasta el momento solo se conoce que los forenses y la policía investigan lo sucedido y mantienen en su poder el ordenador y el teléfono celular del niño.
Cuba cuenta con las mayores cifras de suicidio en América Latina, y las principales causas, según los estudios, son la depresión por los prejuicios sociales y la crisis económica.
Adoración Salinas, una psiquiatra del Hospital Clínico Juan Bruno Sayas, de Santiago de Cuba, explicó a CubaNet que “el suicidio en menores de edad ha tenido un significativo aumento en las edades comprendidas entre los 10 y 19 años de edad, siendo el ahorcamiento el principal método. Las causas se centran en el desarrollo psicosocial, en el que influyen factores familiares y las relaciones sociales”.
Por otro lado, el suicidio en adultos también refleja estadísticas preocupantes, pues el país tiene una tasa del 5.5%, según un resumen de la Organización Mundial para la Salud (OMS) a inicios del pasado año. Las principales causas que recoge el informe, en cuanto suicidio en adultos, responde a los desórdenes depresivos, como la perdida de interés o placer, sentimientos de tristeza, culpa o automarginación.
Al respecto, Salinas mencionó que las estadísticas relacionadas al suicidio reflejan que en nueve de diez personas que se suicidan las señales son claras, el resto lo deja entrever, “casi todos los que pretenden quitarse la vida dejan claro en sus acciones su intención, y muchas veces hasta lo expresan verbalmente. Lo que es realmente grave es que existe una baja percepción del riesgo, y las señales se asemejan a otros comportamientos, como intentos de llamar la atención, sin embargo, pocos conocen que una persona con tendencias suicidas no pretende captar la atención de nadie, o por lo menos sucede en la mayoría de los casos”.