El envenenamiento es la forma más común de suicidarse en El Salvador, indica la información estadística oficial.
Entre enero de 2015 y marzo de 2019, el Sistema de Vigilancia Hospitalaria de Lesiones de Causa Externa (Silex) del Ministerio de Salud (Minsal) ha registrado 615 suicidios en el país. Las autoagresiones han sido divididas en diferentes grupos etarios, siendo los hombres los que más suicidan en la edad adulta.
“El suicidio es una autoagresión que lleva a la muerte por decisión propia”, explica el doctor Arturo Carranza Rivas, jefe de la Unidad de Salud Mental del Minsal.
Según Carranza, las formas más comunes de suicidio “son por envenenamiento por pesticidas, aunque habitualmente es matarrata, luego está el ahorcamiento, otra de las maneras frecuentes, y el uso de arma de fuego”.
Aunque hay otras formas como el corte de venas o el salto al vacío, Carranza afirma que las tres maneras antes mencionadas son las que se registran en El Salvador.
Desde el 1 de enero de 2015 hasta el 31 de mayo de 2019, el Silex registró 615 suicidios, cuya principal causa está relacionada a “discusiones o rompimientos de pareja”.
“Hay datos de Medicina Legal que registran las causas, que están relacionadas a situaciones afectivas o de pareja, quizá es la causa más importante, (los suicidios) están ligados a discusiones o rompimientos de pareja”, detalla.
De acuerdo con el Silex, los 615 suicidios se registraron en seis grupos etarios. El primero está comprendido por personas de 20 a 29 años, entre esas edades se suicidaron 109 hombres y 52 mujeres.
El segundo por adultos de 30 a 39 años, de los cuales se autoagredieron 87 hombres y 37 mujeres. En el tercero se ubican los niños y adolescentes de 10 a 19 años, de éstos se registraron 32 suicidios entre el género masculino y 74 entre el género femenino.
Asimismo, hubo 68 hombres y 20 mujeres, cuyas edades oscilaban entre los 40 y 49 años, que también se suicidaron.
En el rango de 50 a 59 años se reportaron 54 hombres y 18 mujeres, mientras que el último grupo lo conforman adultos de 60 años en adelante, entre ellos hubo 49 hombres y 17 mujeres que también se autoagredieron.
Hasta hace algunos años, indica Carranza, los adultos mayores representaban un grupo muy importante en las estadísticas, debido a problemas como enfermedades crónicas, reducción de ingresos o por soledad. “En definitiva, la vida así va siendo menos atractiva por una cantidad de limitaciones; los cambios demográficos y las migraciones también afecta a este grupo”, dice.
Actualmente son los hombres adultos los que repuntan en la nómina de suicidios que maneja el Silex. Según Carranza, ellos se ven más motivados a autoagredirse por consumo de sustancias, pérdidas (algún desamparo), discusiones de pareja o por ansiedad y depresión.
“A nivel general, las enfermedades crónicas o mentales, la edad, el consumo de sustancias o el alcoholismo son considerados como factores” que vuelven más vulnerable a una persona a buscar el suicidio.
Al consultar sobre la violencia intrafamiliar como causa o factor de suicidio, Carranza explicó que “deben haber casos relacionados, pero que no hay estadísticas” en el Minsal al respecto.
Tras la reforma de salud, realizada en el 2010, el galeno señala que se la ha otorgado mayor importancia a la salud mental al interior del Minsal. Hasta el momento, la institución cuenta con 120 sicólogos distribuidos en los hospitales nacionales y Unidades Comunitarias Especializadas en Salud Familiar, y 47 psiquiatras.