El hombre se realizó una operación a la vista en 1996. Sin embargo, esta lo dejó con fuertes migrañas. Con el objetivo de terminar con el sufrimiento, él se suicidó
Paul Fitzpatrick era un ciudadano canadiense quien se suicidó luego de aguantar más de 20 años de migrañas intensas. Estos dolores fueron resultado de una operación a la vista mal hecha.
El paciente de 56 años describió los dolores de cabeza que sentía como agujas en sus ojos. Él dejó una carta antes de suicidarse en octubre, en donde señalaba que la agonía que sentía lo llevaba a quitarse su propia vida.
‘Ya no puedo experimentar ningún tipo de placer’’, señalaba la nota. ‘‘Desde 1996 dolor, dolor y más dolor. Por favor, perdónenme por no ser lo suficientemente fuerte para aguantarlo. Los últimos meses han sido intolerables’’.
Los padres del hombre aseveraron que su vida fue arruinada y que muchas personas a su alrededor fueron dejadas sufriendo.
Fitzpatrick usaba lentes desde los 12 años. Él pensó que realizarse esta operación a la vista sería la solución para no depender de estos.
Luego de la operación comenzaron los dolores. El hombre comenzó múltiples tratamientos y también se sometió a otras cirugías para intentar ayudar con el dolor. Sin embargo, este solo empeoró.
Meses antes de suicidarse Paul Fitzpatrick mantenía sus ojos cerrados la mayor parte del tiempo.
La familia del hombre ahora cree que pudo haber tenido una condición no muy común, llamada neuralgia corneal. Ellos indicaron que están compartiendo esta historia para crear conciencia sobre las complicaciones que pueden derivar de las cirugías láser a los ojos.
La muerte de Paul es el primer suicidio documentado relacionado a una cirugía láser de vista en Canadá. En Estados Unidos ya se han registrado 10 casos como estos.