Rupturas amorosas, bullying en la escuela y problemas de autoestima suelen ser desencadenantes. La alarma que generó que las redes sociales empezaran a tomar medidas para prevenirlo.
Desde que las redes sociales permitieron transmitir en vivo, millones de usuarios empezaron a utilizar la herramienta para mostrar el minuto a minuto de su rutina. Pero algunos lo eligieron como vidriera explícita para mostrar un trágico final: su propio suicidio.
A raíz de la seguidilla de casos que aparecieron en Internet, Facebook decidió implementar un sistema de prevención gracias a la inteligencia artificial. La empresa creó el equipo de Community Operations, que funciona en 50 idiomas, para detectar toda situación de riesgo. Ya sea por un mecanismo automatizado o por un reporte de un usuario, si los empleados detectan el peligro, pueden dar aviso a las autoridades locales.
Los casos que más resonaron en el mundo
El actor de Hollywood Frederick Jay Bowdy transmitió el pasado 23 de enero su suicidio por Facebook Live. El joven estadounidense , de 33 años, había sido arrestado en California por una denuncia de acoso sexual.
Al principio, sus seguidores pensaron que se trataba de una broma, hasta que efectivamente confirmaron que era real. A pesar que uno de sus familiares advirtió a la policía del hecho, cuando los efectivos llegaron a su casa ya fue tarde.
Otro de los casos que estremeció a Estados Unidos fue la historia de Nakia Venant, una adolescente de 14 años que se ahorcó con su bufanda en el baño. La escena la transmitió en vivo, durante dos horas, también por Facebook.
Entre los espectadores de la tragedia estaban varios de sus amigos, que intentaron calmarla y disuadirla. Aunque le quisieron avisar a la policía, una de las nenas envió la dirección incorrecta. Cuando lograron llegar a la casa, ubicada en Miami, los oficiales encontraron el cuerpo en la ducha.
A diferencia de estos casos, que sucedieron dentro de las casas de los protagonistas, una tailandesa decidió suicidarse en medio de la calle y le pagó a un taxista para que registrara el momento en Facebook Live. En las imágenes, Nittaya Sawatdiwan, de 18 años, aparece en un puente de Bangkok haciendo chistes con una botella de vino. Pero de manera repentina, la joven salta por la baranda y cae al río.
El conductor, que fue cuestionado por no haber evitado la tragedia, declaró ante las autoridades que él no sabía de sus planes y que solo recibió dinero extra para grabarla en la calle. Dos días después del incidente, encontraron el cuerpo en el agua.
Esta tendencia de los suicidios en vivo también se registró en Rusia. El youtuber y blogger Arslán Valéyev, de 32 años, dejó que la serpiente más venenosa de África lo picara para morir ante la cámara.
El experto en reptiles explicó que lo hacía tras no poder superar su ruptura matrimonial. Antes de morir, le dedicó unas palabras a su exmujer y quedó sentado frente a su computadora mientras el veneno hacía efecto.
El último caso se trata de Katelyn Nicole, una estadounidense de 12 años, que empezó a ganar seguidores con su canal de YouTube. Sin embargo, una tarde como cualquier otra apareció ante la cámara y , durante una transmisión de cuarenta minutos, se suicidó. En sus últimos dichos, la chica reveló que fue abusada sexualmente por un familiar, pero no llegó a dar más detalles.