La consejera de Salud expuso las líneas maestras de la Estrategia de Prevención del Suicidio
gasteiz – Aproximadamente el 20% de las personas que tratan de quitarse la vida repiten su tentativa en el plazo de un año, mientras que entre un 60 y un 70% de las personas que intentan suicidarse no acude a las consultas ambulatorias, señalaron ayer los expertos que explicaron en el Parlamento Vasco la Estrategia de Prevención del Suicidio en Euskadi.
La consejera de Salud, Nekane Murga, informó a la comisión parlamentaria de la constitución de la comisión interinstitucional que liderará la Estrategia de Prevención del Suicidio, que ya fue presentada públicamente el pasado junio, y cuya prioridad a corto plazo es crear un Código de Riesgo Suicida dentro de la historia clínica electrónica. La consejera indicó que el despliegue de la Estrategia preventiva del suicidio tiene como prioridad “a corto plazo” la creación de un código de riesgo en la historia clínica electrónica de Osakidetza, una medida dirigida a posibilitar una mejor identificación y un seguimiento más estrecho del paciente en riesgo.
La psiquiatra Andrea Gabilondo, que acompañó a Murga en la comparecencia, hizo hincapié en la dificultad de contar con datos fiables de tentativa y de suicidios por el “estigma” que rodea a este problema, lo que dificulta que los posibles casos se registren. Los expertos consideran que el porcentaje de repetición en un año de las tentativas es de un 20% y que entre un 60 y un 70% de quienes tratan de suicidarse no acude después a las consultas ambulatorias.
Gabilondo llamó la atención sobre la importancia de hacer un seguimiento “lo antes posible” de estos pacientes desde el área de salud mental. Para ello, el código de riesgo en el que se va a empezar a trabajar contempla la inclusión de una “alarma” en la historia clínica de estas personas y la creación de la figura del profesional referente en consejo sanitario, que se encargaría de hacer un seguimiento y de apoyar al paciente. “Se trata -explicaron- de una adaptación del código que ya opera con buenos resultados” en Catalunya.
Detección La estrategia vasca, premiada recientemente por la Asociación Internacional del Prevención del Suicidio (IASP), pretende avanzar en la detección precoz de las conductas de riesgo suicida para actuar con celeridad y de forma coordinada, y persigue dar visibilidad social al suicidio.
La consejera de Salud, que anunció que su departamento y la UPV/EHU colaboran para ofrecer desde el próximo curso el primer título universitario presencial en el ámbito de la prevención del suicidio, subrayó la importancia de “combatir tabúes y estigmas”. “En Euskadi no hemos empezado de cero pero vamos a dar un salto cualitativo con esta estrategia”, resaltó Murga, quien recordó que este documento consta de 57 medidas. Además del código, se elaborará un “mapa de suicidios” para conocer los métodos y las zonas de riesgo, y se incluirá un espacio específicamente relacionado con el suicidio dentro del Observatorio de Salud de Euskadi para poner en marcha un sistema de información sobre la conducta suicida y hacer vigilancia.
También se instaurará un registro de suicidios y otro de tentativas, con información fiable sobre casos atendidos en los servicios de salud. Se quiere instaurar asimismo un protocolo de acción integrado para profesionales de primera intervención de distintos ámbitos en crisis suicidas y llevar a cabo campañas periódicas de sensibilización ciudadana para combatir el estigma. – Efe / E. P.