Una de sus modelos denuncia a través de Instagram la falta de sensibilidad de la marca
La última firma en ser víctima de las críticas por un diseño poco acertado ha sido Burberry. Después del jersey ‘blackfacing’ de Gucci , llega la sudadera que simula llevar una soga colgando del cuello, parte de la colección Otoño-Invierno 2019 de la marca británica. La dirección de la marca se ha visto obligada a retirar la prenda y a pedir disculpas por el descuido después de que una de sus modelos emitiera un comunicado a través de su cuenta de Instagram.
En su publicación, Liz Kennedy advierte que “El suicidio no es moda. No es glamuroso ni atrevido” y se dirige directamente al Director Creativo de Burberry: “Ricardo Tisci y todo el mundo en Burberry, no sé como habéis podido dejar que un ‘look’ que parece llevar una soga al cuello salga a la pasarela”.
LA VANGUARDIA