La mayoría de los suicidas presentan dos o más señales dentro de un periodo de tres meses antes de que decidan quitarse la vida, concluyó un reciente estudio acerca del desarrollo de un nuevo modelo para predecir el riesgo de suicidio en Estados Unidos.
El estudio reveló que combinar registros de salud electrónicos con resultados de cuestionarios estandarizados de depresión permite predecir mejor el riesgo de suicidio en los 90 días siguientes a las consultas a especialistas de salud mental o visitas ambulatorias de atención primaria.
Identificar estas señales y permanecer alertas a cualquier indicio de riesgo de suicidio puede significar salvar una vida, señala el reporte realizado por un equipo de la Red de Investigación de Salud Mental, dirigido por científicos de la organización sin fines de lucro Kaiser Permanente.
La importancia de que actúen en conjunto sistemas de salud, médicos de primer contacto, familia, amigos y personas cercanas, resulta crucial para comprender, ayudar y apoyar a quienes dan claros síntomas de estar en riesgo de suicidio, según el análisis, publicado en el American Journal of Psychiatry.
El estudio «Predicción de intentos de suicidio y muerte suicida después de visitas ambulatorias utilizando registros electrónicos de salud» fue realizado con base en información de Colorado, Hawai, Oregón, California y Washington, del Sistema de Salud Henry Ford en Detroit y del Instituto HealthPartners en Minneapolis.
Según los autores del reporte, combinando una variedad de información de los últimos cinco años de los registros electrónicos de salud de las personas y las respuestas a cuestionarios estandarizados, los nuevos modelos predecían el riesgo de suicidio con mayor precisión que antes.
Los investigadores indicaron que este estudio mejora los modelos anteriores que usaban menos predictores potenciales de los registros de los pacientes, mientras que la evaluación más tradicional del riesgo de suicidio, que se basa solo en cuestionarios o entrevistas clínicas, es aún menos precisa.
Los factores de predicción más fuertes incluyen intentos de suicidio previos, diagnósticos de salud mental y uso de sustancias, medicamentos psiquiátricos, atención hospitalaria o en salas de emergencia y puntajes en un cuestionario estandarizado de depresión.
«Demostramos que podemos usar datos electrónicos de registros de salud en combinación con otras herramientas para identificar con precisión a las personas con alto riesgo de intento de suicidio o muerte por suicidio», indicó Gregory E. Simon, psiquiatra de Kaiser Permanente en Washington y uno de los autores del estudio.
Los índices de suicidio aumentaron 25 por ciento en Estados Unidos durante las últimas dos décadas, de acuerdo con el más reciente informe de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), según el cual, casi 45 mil estadunidenses se suicidaron en Estados Unidos en 2016.