Es uno de los datos que se extrae de la I Jornada sobre Salud Mental en población Infanto-juvenil
Zaragoza
Cada 3 días se produce en Aragón 1 suicidio y llegan a los hospitales entre 7 y 8 intentos autolíticos al día. Son datos que muestran solo una pequeña parte de lo que está pasando porque la enfermedad mental y el suicidio se han disparado tras la pandemia. Sin embargo como señala María José Ochoa, psicóloga clínica y cofundadora de la Asociación aragonesa para la prevención del suicidio, el coronavirus no es del todo el responsable «tenemos una sociedad tremendamente productiva donde si sacas un 4 en matemáticas eso es lo que vales». Por eso apunta que es importante el rendimiento escolar, sacar buenas notas pero es fundamental «saber quien eres, qué quieres ser en la vida que a lo mejor con tanto estrés no estamos favoreciendo un espacio para saberlo»
Uno de los temas que hay que abordar es hablar de suicidio, por muy difícil que sea. Así lo reconoce Antonio, cuya hija acabó con su vida en una tarde aparentemente normal «esa tarde la vi cinco minutos antes por el pasillo, y estaba algo nerviosa, efecto de la medicación que le estaban regulando, pero uno de los mejores días». Así lo ve también la doctora Ochoa, y es que hablar sobre el suicidio es necesario nunca debe evitarse «todas las ideaciones suicidas han de atenderse, lo de llamar la atención no existe»
La enfermedad mental es la causa en adultos, pero no en adolescentes aquí la influencia de las redes es mayúscula, están desencadenando trastornos de la alimentación como explica Ana Notivoli, psicóloga infanto-juvenil «el 95% de la información que les llega son filtros no es real» y menciona estudios que demuestran que «hasta el 75% de las jóvenes que ven fotos en Instagram se sienten peor consigo mismas».