Los padres del menor consideran que desde el colegio no tomaron las medidas suficientes para hacer frente al acoso escolar y se preguntan por qué su hijo seguía sentado al lado de los presuntos acosadores y por qué la psicóloga del centro no actuó.
Un niño de 11 años está vivo de milagro después de lanzarse al vacío desde un cuarto piso en Mislata, Valencia. El menor se salvó porque cayó encima de un vehículo que amortiguó de alguna manera la caída.
Los padres del menor denuncian que el niño estaba siendo acoso en el colegio y que en el colegio no tomaron las medidas suficientes porque se podría haber evitado.
Desde la Consejería de Educación aseguran que el centro realizó los procedimientos correspondientes tras ser avisados por la madre al inicio del curso escolar y subrayan que en una reunión de seguimiento celebrada en abril, el padre del menor aseguró que los compañeros ya no se metían con su hijo.
Aclaran además que la autolesión del menor no se produjo en el centro educativo y que cuando se conoció el incidente, desde el centro se activó la Unidad de Atención e Intervención.
Por ello, aseguran que tanto el equipo directivo, la inspección educativa, la tutora del menor, el orientador y los expertos han estado al tanto de lo ocurrido con este alumno.