Uno de los participantes ha descendido por la fachada de la vivienda con una cuerda. Una vez a su altura, se ha abalanzado hacia la joven impidiendo que cayera del cobertizo donde había subido
La noticia no hubiera salido a la luz si uno de los bomberos participantes no hubiera explicado lo ocurrido hoy en Tarragona, muy cerca de la Part Alta.
El tema es delicado, es un intento de suicidio, y la protagonista una menor de edad. Por ello, la acción de Bombers era compleja para que no terminara en tragedia y delicada si salía a la luz pública. Incluso hay quejas formales a la filtración de datos de lo ocurrido, admiten desde la Direcció General d’Emergències de la Generalitat.
La historia ha terminado en final feliz. La joven, situada en un tejado a unos 4 metros de la calle ha sido interceptada por un bombero que se ha deslizado por la fachada lateral con una cuerda y lejos de la vista de la pequeña.
Al otro lado, otro bombero intentaba hablar con la joven y le pedía que desistiera de lo que en esos momentos le nublaba la mente. Mientras había diálogo con la menor, el bombero ha bajado con la cuerda hasta su altura.
Y mediante comunicación por radio se ha sincronizado el momento en que se ha abalanzado sobre ella (haciendo rápel) y la ha cogido sin posibilidad de que se precipitara a la calle.
La historia ha terminado bien, con un buen trabajo de Bombers que se ha conocido por la filtración de alguno de sus integrantes. Bombers ha confirmado la historia al Diari pero ha explicado que los suicidios y las tentativas de suicidio no se explican y más si la persona implicada es un menor de edad.