Con esta obra buscan crear consciencia entre jóvenes y adultos para prevenir muertes a causa del suicidio.
Alma, una madre que vive las angustias generadas después de perder a su hijo de 11 años tras suicidarse, se enfrenta a las duras preguntas de una psicóloga forense que investiga el caso. El suicidio es la razón de «Niño, una autopsia psicológica«, la obra de teatro que busca hacer reflexionar a los espectadores sobre una de las principales causas de muerte en jóvenes.
La obra no necesita de una gran escenografía para adentrar al espectador en la trama. Dos actrices, Minerva Velasco y Andrea Méndez, acompañadas de los voz off de Jorge, el hijo de Alma y su mejor amigo, son los elementos principales de esta obra de teatro, la cual transcurre un mes después de que Jorge se quita la vida. Las razones que motivaron a un niño a suicidarse se darán a conocer conforme avanza la obra, compuesta por nueve escenas.
De esta manera, el espectador conoce no solo en los motivos del niño, sino en lo que viene después. Como el trato de las instituciones hacia la madre, la poca información que reciben los padres y madres para prevenir a sus hijos, así como una serie de argumentos en los que está basada la educación hacia los menores de edad y los tabués que existen entorno al tema.
«Es muy importante que estemos alerta en cómo nos sentimos, en nuestros estados de ánimo y sobre todo en los niños. Que como padres de familia estemos pendientes de lo que sienten, de lo que piensan, de las cosas que les inquietan. Creo que gran parte de que podamos lograr evitar que esto suceda (el suicidio) es la comunicación abierta y constante con los hijos y la familia».
Niño, una autopsia psicológica, retrata una de las realidades actuales. Según un informe de la Organización Mundial de la Salud, en los países con bajos ingresos se registra el 75% de los suicidios mundiales, los cuales llegan a más de 800 mil cada año, siendo esta la segunda causa de muerte en personas de 15 a 29 años.
De esta realidad, los niños y las niñas no se escapan. Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, INEGI, indican que la tasa de suicidios en menores de 10 a 17 años ha ido en aumento. En el 2015 se registraron 6,425 suicidios en menores de ese rango de edad. Del 2006 al 2015, por cada 100 mil niños en México la tasa subió de 2.6 a 3.8 menores.